Entrevistas al Presidente del CF
Ejecutivo publicó la semana pasada las nuevas reglas Macrofiscales para el gobierno nacional y las autoridades subnacionales. “Ojalá que la esperanza de vida de esta nueva regla sea un poco más larga, para ver si es mejor que la anterior”, comenta el economista Waldo Mendoza, presidente del Consejo Fiscal (CF), una entidad independiente que opina sobre la política fiscal del Ejecutivo. Mendoza recuerda que la última regla fiscal, basada en un déficit estructural, apenas duró un año.
¿Por qué el CF dice que las nuevas reglas podrían exacerbar la volatilidad de la economía?
En el caso de la regla anterior, uno podía decir que era acíclica. El gasto público ya estaba pre-programado y esa pre programación se respetaba sin importar qué pasara con la producción. En cambio, no se puede decir que esta [nueva] ley tiene una regla acíclica, procíclica o contracíclica, porque depende de las circunstancias macroeconómicas. Si la restricción fuera la regla de gasto no financiero, que usa un promedio de 20 años del PBI, podría ser acíclica en algunos casos. Si el límite lo impusiese la regla del déficit fiscal, el gasto es procíclico: si la economía se cae y los ingresos se caen, para respetar la regla del déficit se debe bajar el gasto. Y la regla de la deuda es parecida: si el PBI crece, la deuda pública como porcentaje del PBI cae y se tiene mayor margen para gastar más.
El tope de gasto no financiero se fijará sobre una banda de +/-1 punto porcentual del crecimiento del PBI de largo plazo. ¿Por qué el CF ha calificado esta regla como laxa?
La tasa de crecimiento [de la regla de gasto no financiero del gobierno general] se calcula a partir de un promedio del alza del PBI de los últimos quince años más los estimados para los próximos cinco. Eso resulta 6,1%. Es altísimo. ¿Por qué es altísimo? Por una razón bien práctica: se está tomando el período de 15 años de mayor crecimiento económico en el Perú en 120 años. Además, las proyecciones de los próximos cinco años siempre son entusiastas.
El CF fue crítico cuando se eliminó la regla estructural anterior. ¿Mantiene su posición ahora que se conocen las nuevas reglas?
La transición fue un poco abrupta porque no solo transitamos de una regla estructural a una de déficit observado sin mayor explicación, sino que también en esa norma quedó al aire la situación de los gobiernos regionales y locales. De allí nuestra extrañeza. En este pronunciamiento estamos diciendo básicamente lo mismo –si lo lees con cuidado–, porque lo que te estoy diciendo ahora es que, en rigor, ni la norma de la deuda ni la del gasto púbico son un cuello de botella, ni lo van a ser en el 2017 o en el 2018. En la práctica, nos estamos jugando con la regla del déficit observado con todos los defectos que esta tiene.
En esa línea, el CF advierte que el 73% del gasto corriente del Gobierno es poco flexible.
El Gobierno tiene una regla de gasto, [pero] los gobiernos regionales y locales tienen otras reglas. Eventualmente, esas reglas de los subnacionales pueden hacer que el gasto crezca y, frente a una meta nacional, el gasto [del gobierno nacional] tendría que achicarse. ¿Qué parte se reduciría? No pueden ser salarios y pensiones, sino inversión pública. Esa es la advertencia que hace el Consejo.
La ley exonera del cumplimiento de las reglas fiscales a gobiernos subnacionales con calificación crediticia BBB+. ¿Incrementarán su deuda de manera ilimitada?
Creo que es la única frase de nuestro comunicado en la que decimos que “cuestionamos”. […] Nuestras observaciones son tres. Una, ¿por qué hacer excepciones? De lo que hemos averiguado, hasta el momento, solo la Municipalidad Metropolitana de Lima tiene calificación crediticia y tiene deuda avalada por el Estado. Entonces, es lógico que si el Gobierno avala la deuda, su calificación por definición tiene que ser buena. Si el
Gobierno Peruano avalase la deuda del municipio de Chumbivilcas, seguramente podría tener una buena calificación crediticia.
Además, se ha demostrado en la crisis del 2008 y 2009 que no hay que creerles a las calificadoras. Se han equivocado monstruosamente. Lo otro que subrayamos es que no hay reglas para estos gobiernos, simplemente están exonerados. Es decir, pueden tener todo el endeudamiento que puedan conseguir.