Entrevistas al Presidente del CF
En la década de 1960 solo Holanda tenía un consejo que opinaba sobre las políticas y resultados fiscales. Pero la crisis del 2008 puso de moda este instrumento por la crisis de credibilidad de las cuentas públicas. El Perú este año se sumó a los cerca de 40 países que cuentan con una institución de este tipo. El economista Waldo Mendoza es su primer presidente.
¿Cómo fue el proceso para emitir su primera opinión sobre el Marco Macroeconómico Multianual (MMM) 2017-2019?
Fue un trabajo apresurado. Nos enviaron el MMM 2017-2019 y durante 15 días nuestros técnicos interactuaron con el MEF sobre cifras, técnicas y procedimientos. Finalmente, nos enviaron una versión sobre la cual el consejo se pronunció por consenso. Algunos temas de nuestra carta fueron considerados en la versión publicada del MMM 2017-2019. Decíamos que era necesario que se publicaran los pasivos contingentes del Estado y así se hizo.
¿Qué visión del futuro económico tiene el MMM 2017-2019?
El escenario internacional es el más severo de los últimos 65 años. Por esta razón la situación fiscal, que antes era buenísima, en los últimos 4 o 5 años se ha debilitados. Los ingresos ya no crecen al ritmo de los tiempos del ‘boom’ pero los gastos sí. Esta trayectoria no es buena. Felizmente, la ley de fortalecimiento de la responsabilidad fiscal dice que, en estas condiciones, deberíamos converger hacia el 2018 a un déficit estructural de 1%, con el cual la deuda publica llegaría alrededor del 30% del PBI. Por eso, el MMM 2017-2019 propone una trayectoria de ajuste del gasto.
¿Una parte de su pronunciamiento se puede interpretar como una invocación al siguiente gobierno a respetar ese ajuste?
En realidad, lo que decimos es que la trayectoria propuesta por el MEF no parece muy exigente, quizá hasta un poquito irreal, porque considera que los gastos de inversión no se van a caer y que el ajuste será por el gasto corriente. Pero nos parece una buena aspiración. La siguiente administración tendrá todo el derecho de cambiar las normas y decidir si el nivel de deuda debe seguir siendo 30% del PBI, o si debe ampliarse. Estamos lejos de un 50% que ya es peligroso. Nuestro ajuste fiscal no es como el de Colombia, Brasil o Venezuela, donde deben bajar gastos.
En su carta mencionan que hay riesgos internacionales. ¿Cuál sería la tormenta perfecta?
Nuestra impresión es que el escenario internacional ha tocado fondo. No va a mejorar en el corto plazo, pero tampoco va a empeorar. El gran riesgo es que China no crezca a 6% sino a 3%. Es un escenario extremo que el MEF considera en el MMM 2017-2019 porque, aunque es improbable, tendría un gran impacto. La bonanza del 2002-2012 es parte de la historia, no se va a repetir. Los grandes ingresos provenientes de la minería ya no van a venir, ni por precios ni por volúmenes. A partir del 2019, la producción minera no crecerá.